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Viernes, 28 de noviembre de 2014   |  Número 96
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 DIMISIÓN DE LA MINISTRA DE SANIDAD, SERVICIOS SOCIALES E IGUALDAD
SOLO DEFIENDE QUE LA EXMINISTRA IGNORABA EL HECHO DELICTIVO
Rajoy pasa página con la dimisión de Mato
Sin embargo, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha defendido a ultranza a su compañera de filas

Cristina Alcalá / Redacción. Madrid
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha mostrado una defensa tibia tras la dimisión de su ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, tras ser señalada por el juez Pablo Ruz como partícipe, a título lucrativo, de las actividades de su exmarido Jesús Sepúlveda, implicado en la trama ‘Gürtel’.


El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Rajoy, apelado por todos los grupos parlamentarios por esta dimisión, no ha querido entrar a valorar su ausencia, y únicamente se ha centrado en explicar el auto dictaminado el miércoles por la Audiencia Nacional y en salir en defensa de su partido tras los últimos acontecimientos.

Una posición muy diferente a la que ha tomado el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Alfonso Alonso, quien ha protagonizado una defensa a ultranza de Ana Mato, además de mostrar su orgullo por estos tres años de gestión. El popular ha apelado también a su sentido de la responsabilidad de la exministra al dimitir, para no dañar la imagen del Gobierno y del partido.

La oposición no se olvida de la ausencia de Mato

En su turno de intervenciones, todos los grupos parlamentarios han hecho referencia a la ausencia de Mato. El primero en hablar ha sido el líder de los socialistas, Pedro Sánchez, quien ha alegado que la dimisión de la ministra “apunta directamente al PP”, que aparece en el mismo escrito oficial del juez Ruz. “Primero dijo que todo era falso, luego que todo era falso salvo alguna cosa, hoy con la dimisión de Mato sabemos que todo era cierto”, ha espetado.

Por su parte, Cayo Lara, de IU, ha señalado las filas populares por “estar llenas de corrupción” y se ha preguntado que quién será el siguiente en ser cesado. Un testigo que ha recogido la diputada del BNG, Olaia Fernández para exigir la dimisión del propio presidente del Gobierno.

La formación de Rosa Díez, UPyD, ha sido una de las más críticas con el Ejecutivo de Rajoy, al considerar como un acierto la dimisión tomada ayer por Mato. “Es lo que tenía que hacer”.

Giro inesperado en el departamento de Mato

El miércoles por la tarde, fuentes del Ministerio de Sanidad daban a entender que Mato no dimitiría, sino que seguía con su agenda de trabajo y que este jueves acudiría a la Cámara Baja. Sin embargo, los acontecimientos dieron un giro inesperado a última hora de la tarde, cuando la popular presentó su dimisión al presidente del Ejecutivo.

Ana Mato ha justificado su decisión de dimitir para que su permanencia al frente del departamento de Sanidad no sea utilizada para perjudicar a la Administración central, al presidente Rajoy y al Partido Popular.

Continuará trabajando en el Congreso

La ahora exministra seguirá de diputada ‘rasa’ en el Congreso de los Diputados, realizando el trabajo parlamentario que, a partir de ahora, le encargue el Grupo Popular en esta cámara, pero desde un escaño diferente, al abandonar el ‘banco azul’ desde donde se sitúa el Gobierno.

Igualmente, seguirá siendo miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PP, un cargo que lleva ostentando desde 2012, donde ha asumido varias responsabilidades, especialmente, en materia de campaña electoral.

Tercera crisis de Gobierno

La dimisión de la ministra ha forzado que Rajoy realice la tercera remodelación de su gabinete. La anterior ocasión se dio el pasado 23 de septiembre, cuando el entonces ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, anunciara que dejaba el cargo tras la retirada de la reforma de la ley del aborto. Una semana después, Rafael Catalá asumió el cargo al frente de este departamento.

La salida de Gallardón siguió a la del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, del pasado mayo. Aquella sustitución no fue convulsa, ya que Rajoy lo situó como el candidato del Partido Popular al Parlamento Europeo de cara a las elecciones que se celebraron en ese mes. Le sucedió Isabel García Tejerina.

En ambos relevos se han colocado a dos secretarios de Estado con un perfil más técnico que político y, por tanto, elegidos para continuar la labor de los departamentos hasta el final de la legislatura.

 

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