Leire Sopuerta Biota.
Una vez terminada la legislatura y tomada la decisión de que no continuará en política, Javier Marcotegui, portavoz de UPN en la Comisión de Sanidad del Parlamento navarro ha hecho balance de la actividad sanitaria desarrollada durante estos últimos cuatro años. Su primera impresión es que la legislatura ha sido “muy dura” y el debate sanitario se ha desarrollado “sin amabilidad” y “con escaso contenido”. Además, ha criticado el trabajo de la oposición por sus “ideas preconcebidas y su poco apoyo para construir un futuro sanitario que se pueda mantener en el tiempo”.

Marcotegui.

El también vicepresidente primero del Parlamento navarro ha criticado el argumento repetido por la oposición y basado en la pérdida de calidad del sistema sanitario navarro, algo que, a su juicio, “no tiene fundamento” porque “no hemos perdido la posición de cabeza y numerosos estudios y encuestas lo aseguran”.

Marcotegui, que tiene la impresión de que la oposición no ha sabido hacer su trabajo, ha asegurado que, aunque se han aprobado doce o trece leyes, “muchas de ellas son reglamentistas”. Para el diputado esto es un error ya que “se ha querido dar carácter de ley a temas que son reglamentos”. Y, como ejemplo, ha hablado de la “mal llamada” Ley de Salud Mental, “que lo que en realidad hace es organizar el departamento de Salud” o de la ley que crea una banco de objetores de conciencia, “algo que no tiene sentido”.Además, el popular ha criticado que algunas de estas iniciativas legislativas “perjudican el principio de equidad”. En concreto, se ha referido a la norma sobre el cambio de sexo en los transexuales, “no tiene sentido que en Navarra se reglamente de una manera y en otras comunidades de otra”, ha dicho; y a la ley sobre cuidados paliativos.

Entre los temas pendientes por rematar, Marcotegui ha destacado la plena implantación de la receta electrónica; la fusión de dos los hospitales, “cuyas estructuras están aprobadas y sus responsables nombrados”; y el impulso a la investigación biomédica, “un proyecto que ya está muy avanzado”.

A nivel personal, el diputado ha asegurado que en estos años como portavoz de sanidad (lleva desde el 2003) ha aprendido muchas cosas y, aunque no es sanitario de profesión, “he trabajado con una intensidad muy fuerte”. Si bien, ha insistido en la “dureza” del trabajo, sobre todo porque “la oposición ha utilizado constantemente la sanidad para hacer desgaste al Gobierno”.