Redacción. Madrid
Eurodiputados de PSOE, IU, Compromís, Podemos, UPyD y Nova Esquerra Catalana han reclamado un debate en el pleno de la Eurocámara el desarrollo de genéricos y medicamentos a precios accesibles para enfermos como los afectados por la hepatitis C.
Soledad Cabezón.
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Soledad Cabezón, dirigente del PSOE, lamentó que la falta de acceso a medicamentos de hepatitis C “pone en cuestión la universalidad de los sistemas sanitarios, un principio irrenunciable para los socialistas”.
La eurodiputada afirmó que su grupo propondrá una normativa a nivel europeo que replantee el precio de los medicamentos “y termine con el comportamiento viciado de las farmacéuticas”.
Plan europeo de acceso a los medicamentos
Por su parte, su homóloga de UPyD, Beatriz Becerra expresó que “es competencia de los Estados miembro fijar los precios y financiar la sanidad pública, pero la Unión Europea tiene el mandato de garantizar la protección de la salud humana”.
Becerra reclamó tanto a la Comisión Europea como al Consejo que elaboren con urgencia un plan europeo de acceso a medicamentos que incluya, entre otras medidas, una revisión profunda del actual modelo de patentes, que disocie los costes de la investigación del precio final de los medicamentos, y políticas de compras agregadas que fortalezcan la posición negociadora de los Estados miembros en la adquisición de medicamentos clave.
Jordi Sebastià (Compromís) tildó al Gobierno español de “irresponsable” por su política de acceso a medicamentos y resumió que el debate que subyace es “¿pacientes o patentes?, ¿multinacionales o personas?”. Sebastià recordó que la declaración de Doha de la Organización Mundial del Comercio de 2001 da pie a las autoridades a limitar las patentes en casos de urgencia sanitaria.
“Las patentes son una condena a muerte”
La líder de IU en la Eurocámara, Marina Albiol, denunció que las autoridades españolas “no subvencionen el medicamento Sovaldi a todos los enfermos (de hepatitis C) que lo necesitan”, dijo. Para Albiol, que “una caja de tratamiento de 12 semanas cueste 60.000 euros se debe a que se protegen los beneficios de la farmacéuticas”. “Las patentes son una condena a muerte para millones de personas en todo el mundo y, a aquellos que lo permiten, les convierte en cómplices de asesinato”, añadió.
Ernest Maragall (Nova Esquerra Catalana) consideró que “Europa no puede permanecer indiferente" ante el tema de los medicamentos y "aún menos dejar esa cuestión en manos del enfrentamiento entre afectados más o menos heroicos y poderes estatales o privados que actúan en contra del interés general”.
“Este Parlamento debe asumir ya la iniciativa para liderar esa doble estrategia y debe hacerlo mediante la adopción de una resolución especifica que desarrolle estos puntos y formule el correspondiente encargo a la Comisión”, dijo Maragall.
Equilibrio en los acuerdos entre Estados y farmacéuticas
De parte de Podemos, la eurodiputada Tania González lamentó que “en España, mueren cada día entre 10 y 12 personas por hepatitis C y el medicamento más eficaz para hacerle frente está restringido por su precio abusivo”. Para González, esa problemática de precios “es consecuencia de que el desarrollo de medicamentos esté orientado a las necesidades del mercado y al beneficio económico de las grandes empresas y no a las exigencias de la salud pública”.
Por su parte, Francesc Gambús, de UDC, llamó a “encontrar un equilibrio que garantice a su vez a los laboratorios farmacéuticos la continuidad de la investigación y la protección de sus patentes y el acceso universal al tratamiento prescrito en la atención sanitaria”. “Sin un retorno económico a los laboratorios, no hay medicamentos nuevos. Y sin medicamentos nuevos, no hay medicamentos asequibles. Hay que romper está circulo vicioso sin romper el frágil equilibrio en él contenido”, añadió Gambús, que fue el único español que intervino del grupo de los populares europeos en la Eurocámara.
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