Leire Sopuerta Biota. Madrid
El presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, Roberto Sabrido, ha comparecido en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados para informar del plan de actividades 2011 y hacer repaso del trabajo elaborado en 2010. En este sentido, Sabrido ha asegurado que de las 32 acciones previstas para el pasado año se han cumplido el 85,6 por ciento de las mismas, es decir, 27.

Sabrido, durante su interevención en la Comisión.

En su intervención ha destacado que “entre las que no ha sido posible su total ejecución eran acciones cuyo cumplimiento no dependía exclusivamente de esta Agencia, como por ejemplo el programa comunitario de seguimiento de prevalencia de listeria monocytoges”. Por otro lado, entre las que sí se han desarrollado ha nombrado el Plan Nacional de Control Oficial de la Cadena Alimentaria 2011-2015 o la elaboración y aprobación del Documento de Consenso Técnico sobre alimentación en centros escolares.

Respecto a las medidas previstas para este año, Sabrido ha asegurado que este año se concluirá el estudio epidemiológico sobre prevalencia de obesidad infantil, cuyos resultados se presentarán en otoño.

El estudio abarca una muestra total de 7.500 niños y niñas de 6 a 10 años. “Dado el tamaño muestral, será significativo también a nivel de las comunidades autónomas”, ha dicho. Dentro del Plan de Reducción de Consumo de Sal, Sabrido ha explicado que la AESAN trabajará para establecer las condiciones de uso de una marca de calidad o logotipo que potencie la reducción del contenido de sal en los alimentos. El objetivo es que el consumidor reconozca los productos que han reducido su sal. “Este distintivo se otorgaría a aquellos productos cuyo contenido en sal sea como mínimo un 25 por ciento inferior al promedio de su categoría”, según Sabrido, quien ha iniciado ya encuentros con la industria, los consumidores y los expertos para llevar adelante esta iniciativa.

Otro de los aspectos “muy importantes” que la Aesan quiere enfatizar es el contenido de grasas y azúcares, “por ello nos vamos a poner manos a la obra en la reformulación de determinados grupos de alimentos, siendo esta además una de las líneas de trabajo de la Estrategia NAOS, que pretende que los ciudadanos dispongan de una oferta alimentaria con menos contenido energético”.