José María Pino, presidente de Sanitaria 2000; José Ignacio Echániz, consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha; y el senador Jesús Aguirre, presidente del Comité Organizador del III Encuentro de Parlamentarios.

Redacción / Imagen: Miguel Ángel Escobar y Diego S. Villasante. Sigüenza (Guadalajara)
El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, ha clausurado el III Encuentro Global de Parlamentarios de Sanidad, celebrado en el Parador de Sigüenza (Guadalajara), organizado por Sanitaria 2000, empresa editora de Publicación de Parlamentarios de Sanidad.

Ante un nutrido grupo de diputados, senadores y parlamentarios autonómicos de toda España, Echániz ha trazado un riguroso análisis de la situación que afronta nuestro sistema sanitario, destacando especialmente que a lo largo de los años “se habían perdido elementos de cohesión” por lo que ahora corresponde hacer “un trabajo muy importante de coordinación”.

El consejero castellano-manchego ha comentado que “en el futuro debe haber debate político, en el que la gestión quedara fuera, porque no son problemas de la izquierda o la derecha”. También ha afirmado que “nada volverá a ser igual en la sanidad española tras esta crisis”, que “el gasto farmacéutico deberá disminuir y acompasarse al de otros países de la Unión Europea, porque necesitaremos cada céntimo de euro para pagar la sanidad”. Echániz ha recalcado la necesidad de que se prime también la eficiencia entre los profesionales sanitarios y que “las retribuciones tengan una parte variable en función del desempeño”.

A juicio del consejero, “este no es el final de las reformas, porque todos los días hay que revisar y evaluar lo que hacemos para corregirlo, sin miedo a los cambios”. Del mismo modo que ha asegurado con contundencia que “la sanidad española no podrá permitirse nunca más deudas en los cajones”.

Dirigiéndose a los participantes en las jornadas celebradas en Sigüenza, el consejero ha destacado que “este encuentro pone en valor el trabajo de los parlamentarios” y nos recuerda que “es imprescindible la máxima colaboración entre los parlamentos y los gobiernos”. Desde su dilatada experiencia como parlamentario, Echániz ha reiterado su fe en el debate de ideas que es propio del parlamentarismo y su confianza en que pueda ser aplicado a “una sanidad de alta calidad y a unos servicios sociales que sirvan a las necesidades de los ciudadanos”.

El ejemplo del cambio, en Castilla-La Mancha

“Desde hace un año, Castilla-La Mancha comenzó un plan de reformas estructurales de su sistema sanitario que aborda prácticamente todos los conceptos de las partidas presupuestarias, así como todos los elementos que configuran las prestaciones sanitarias a los ciudadanos. Hemos abordado cuestiones relacionadas con los profesionales, con la organización de nuestros centros, con la prestación de los servicios, con la colaboración público-privada… en definitiva, con elementos que configuran todas las relaciones que tienen que ver con el ámbito de nuestra sanidad”, ha recapitulado el consejero, para quien “es cierto que Castilla-La Mancha se ha convertido en un foco de atención para otras regiones, precisamente porque los resultados de esas prácticas están siendo muy satisfactorios y revelan que estamos trabajando en la buena dirección e incluso pueden servir de ejemplo para la transformación de otras sanidades en otros lugares de España”.