Sergio López. Madrid
Obed Santos, con una dilatada trayectoria como activista, ha sido profesor de historia, técnico informático y trabajador “precario” antes de ser elegido diputado por Podemos en la Asamblea de Extremadura. Como portavoz de la formación morada en la Comisión de Sanidad de la cámara, Santos dedica sus energías a desenmarañar el problema de las listas de espera en la región y a denunciar el incremento del gasto sanitario en recetas, uno de los escollos que encontraron los nuevos presupuestos a la hora de sumar el apoyo de Podemos.

¿Se puede decir que la sanidad es una de las razones por las que Podemos ha dicho que no a  los presupuestos que ha presentado la Junta de Extremadura?

Sin duda. Es una de las principales razones. Sobre todo porque no comprendemos que la Junta no acometa ninguna medida para contener el gasto farmacéutico, que se dispara en estos presupuestos. Entendemos que en los presupuestos de 2015 había una falta de previsión en cuanto a gasto en recetas médicas que hubiese que compensar; pero, en las nuevas cuentas, esta partida pasa a incrementarse en 96 millones de euros, hasta suponer más de 320 millones en total. Es un aumento  de casi un tercio. Extremadura ha pasado de tener un gasto farmacéutico en la media a tener uno de los más elevados de toda España: 277 euros por persona al año, según datos del Ministerio de Sanidad.

Aquí hay algo que no se está gestionando bien. Creemos que tiene que haber formas de reducir el gasto farmacéutico y proponemos ver qué hacen otras comunidades autónomas. Estudiar cómo negocian los precios. Consideramos que una auditoría sobre el proceso de adjudicación de medicamentos ayudaría a reducir los costes.
 

Obed Santos.

Otra de las razones que han mencionado para su negativa a aprobar las cuentas es que no se incrementa el personal en el SES. Sin embargo, crece la partida dedicada a gastos de personal.

Crece el número de puestos intermedios: cargos de libre designación, lo que se conoce como ‘comisión de servicio’. Pero con el presupuesto en la mano, se reduce en 147 personas el número de trabajadores. ¿De dónde sacamos esta cifra? Del anexo de personal de los presupuestos. Si miramos las partidas, vemos el personal contratado. Haciendo la suma de todos los capítulos obtenemos que en 2015 había 16.394 trabajadores dependientes del SES y en 2016, 16.247.  

Hablan del excesivo peso del gasto farmacéutico en estos presupuestos y del aumento de mandos intermedios. En el otro lado de la balanza, ¿qué partidas ven escasas? ¿Qué inversiones echan de menos en el SES?

No vamos a decir que todo lo que está en estos presupuestos nos parezca mal, porque no es así. Nos parece bien que se presupuesten las obras del Hospital de Villanueva-Don Benito. ¡Ya era hora! Pero no entendemos que sólo se presupueste la fase 1 del hospital de Cáceres y no la fase 2. El hospital Virgen de la Montaña de Cáceres, que hace labor de apoyo al centro de referencia, San Pedro de Alcántara, está completamente obsoleto. Hace año y poco se cayeron los falsos techos del servicio de Oftalmología. Ahora que parece que puede volverse a invertir, creemos que es momento de impulsar más decididamente esta obra. Por cierto, nos sorprende que no haya un sistema validado de control de la ejecución de las obras que se van a poner en marcha en la región.

En general, echamos en falta más dinero para la renovación de infraestructuras o, por ejemplo, que se invierta en nuevos aparatos de radioterapia del Hospital de Mérida, ya que están dando muchos problemas, lo que implica un potencial peligro para su salud.

Uno de los principales problemas de la sanidad extremeña es el de las listas de espera ¿Qué se propone desde el grupo parlamentario de Podemos para abordar este problema?

Hemos tenido recientemente una reunión del grupo de trabajo parlamentario sobre listas de espera y, de momento, estamos viendo donde fijamos el punto de partida, porque los datos que nos da la Junta de Extremadura son más de 184.000 solicitudes de listas de espera, pero aplicando el Real Decreto sobre listas de espera nos sale que hay 107.000. Este desfase puede deberse a que la Junta de Extremadura ha introducido una serie de servicios que no se incluyen en el catálogo contemplado en el Real Decreto pero que sí generan lista de espera.

¿Es esta la razón de la reciente polémica entre PP y PSOE? En los últimos meses se han cruzado acusaciones acerca de cómo se miden las listas de espera.

Esta es una parte importante. También hay que tener en cuenta que no es lo mismo 184.000 solicitudes que 184.000 personas. Un paciente puede tener varias solicitudes simultáneas y aparecer, por ejemplo, cuatro veces. Por lo tanto, hemos solicitado que la Junta de Extremadura nos facilite el número de tarjetas sanitarias en lista de espera, independientemente del número de pruebas que tienen asignadas cada una.

Pero hay un consenso por todas las partes en que el número, sea cual sea, es muy elevado. ¿Qué proponen para empezar a absorberlo?

Hay varias razones que pueden explicar lo abultadas que son las listas de espera. Para empezar, tenemos una población envejecida y está fuera de toda duda que eso sobrecarga las listas. A continuación, tenemos que ver si hay un problema de gestión y para eso hemos pedido todos los datos que nos puedan ser útiles: cuántos facultativos de cada especialidad hay en cada área sanitaria, etc… y ver donde hay nodos de colapso. Habría que ver también si todas las pruebas diagnósticas que se piden son necesarias. Pero que sean los médicos y no los políticos los que determinen eso.

Lo que está claro es que si se reduce personal y hay menos facultativos, como sucede con estos presupuestos, las listas de espera no se van a mejorar. La solución no pueden ser las peonadas que se han venido aplicando hasta ahora [el plan de choque de la anterior Administración] y que solo han servido para que el personal hiciese jornadas maratonianas.

El PSOE depende de sus votos en la cámara para gestionar el día a día. ¿Qué iniciativas va a proponer Podemos en la cámara para mejorar la atención de los extremeños?

Hemos pedido la comparecencia de Ceciliano Franco, director del SES, este mes de marzo para que explique el elevadísimo gasto en facturas. Puede parecer que tenemos una obsesión con el gasto en facturas, pero realmente creemos que es un tema de capital importancia, ya que si se consigue reducir lo que se paga por los medicamentos, se podrían liberar recursos para mejorar la calidad del sistema. El sistema extremeño de Salud era uno de los mejor considerados por los ciudadanos hasta 2008 y ya no es así. Lo que se trata es de conseguir que lo vuelva a ser.

Además de eso, a lo largo de las próximas semanas vamos a presentar iniciativas para instar al gobierno a que lleve a cabo iniciativas en áreas como tercera edad, dependencia y obesidad infantil, que es un problema realmente preocupante en Extremadura.